Una Diócesis bendecida

El mes de diciembre del 2018 ha sido un mes de bendiciones para la Diócesis de Sololá-Chimaltenango. Tres acontecimientos importantes han marcado la vida de esta Iglesia particular al final de este año. En primer lugar, estamos agradecidos porque el pasado 4 de diciembre, en nuestra Diócesis, se ha erigido una nueva parroquia. Pujujil II, en Sololá, se convirtió en la sede de la parroquia "San Marcos Evangelista", una parroquia, cuyo pastor y primer párroco, es el P. Alfredo Chavajay. Además de este acontecimiento, el pasado 7 de diciembre, el presbiterio de la Diócesis unido a su padre y pastor, el Obispo, celebró los 25 años de ordenación presbiteral de tres sacerdotes: el P. Juan Pablo Torrebiarte, el P. Julio César Fernández y el P. Felipe Chalí. Dicha celebración se llevó a cabo en las instalaciones del Seminario Mayor de Sololá. Finalmente, con alegría, hemos participado en la solemne celebración eucarística, en la que fueron ordenados tres nuevos sacerdotes. La parroquia sede que acogió a los padres, Kevin Xmínes, Marlon Quelex y Franklin Juracá, fue san Lucas Tolimán, una comunidad ubicada en la orillas del Atitlán. En definitiva, Sololá-Chimaltenango es una Diócesis bendecida que crece y madura, una porción del pueblo de Dios que agradece las bendiciones de Dios y ora para que, feligreses y pastores, caminen juntos al encuentro del Señor.